NEW GUATAVITA

Volver a lugares que viví en diferentes épocas de mi vida, fue reencontrarme con distintas sensaciones, y lo que me encanta es que siempre es un lugar nuevo para mí o nuevo para Milo, al ir a Guatavita nueva sentí eso, que fue toda una nueva experiencia.

Para llegar a este lugar desde Bogotá tuvimos que ir hasta el portal norte, allí dentro o fuera de la estación de transmilenio se toma el intermunicipal camino a Guatavita, el costo del trayecto es de aproximadamente $10.000 COP, uno sabe que está cerca porque ve un embalse enorme.

((Aquí es donde tengo que confesar que siempre pensé que esa era la laguna de Guatavita, la verdad nunca me detuve a mirar el mapa o a entender la gran historia de este pueblito y mucho menos porque cuando uno se baja del transporte lo primero que hacen es ofrecerle un tour para la laguna de Guatavita, en realidad parecía muy cerca para pagar a alguien que te la mostrara, luego Milo me hizo caer en cuenta de eso))

Como dije antes no era la primera vez que yo iba a Guatavita nueva, pero esta vez el motivo fue poder estar en un lugar muy sereno para reencontrar valores e ideales fundamentales de nuestra relación, con Milo me he proyectado a tener y planear propósitos que nos hagan evolucionar como personas y claro esta como pareja y yo siento que Guatavita nueva es un pueblito que saca los orígenes de una historia olvidada, realmente es muy relajante estar en el mirador e intentar adivinar como es fue que destruyeron para volver a construir una copia de un pueblo colonial dejando todas las casa blancas y con el único ingreso económico que es el turismo.

Conocer poco a poco los espacios que brindan, las actividades que se pueden hacer, saber que allí estaba la plaza de toros más popular de Cundinamarca y que la cultura avanza tanto que ya solo es un escenario de exposiciones, tiene decoraciones muy claras sobre lo que son las leyendas del dorado, de hecho quiero compartir mi leyenda favorita:

LA CACICA GUATAVITA

Por Dr Litt. Héctor José Corredor Cuervo

Era una cacica bella y del cacique la esposa quien siendo amable y graciosa al pasar dejaba su huella con aroma de doncella, sin saber que la atracción nublaba hasta la razón y blindaba el pensamiento para aguantar sufrimiento de un gran amor con pasión.

Siendo testigo la luna con el sol complicidad por temor a la crueldad se zambullo en la laguna bajo el manto de la bruma la amante del gran guerrero que le dio amor verdadero con caricias de ilusión sabiendo que en la prisión moría por traicionero.

Bajo las aguas descansa con figura de serpiente y con su hija hoy ella siente los sonidos de la danza que llegan de la labranza donde Sua la sorprendió con el amante que dio su vida y su corazón rugiendo como un león por la mujer que adoró.

Luego de tanta historia me gusta que por la gran diversidad de las frutas que cosechan en Cundinamarca, tienen un sinfín de postres, es también uno de esos pueblitos donde uno encuentra comida deliciosa en la plaza de mercado a muy buenos precios, artesanías como ruanas, gorros, guantes, hecho por los habitantes y para finalizar cuando uno camina hacia el embalse al ver el atardecer, se puede encontrar con un tour con un indígena nativo, que está explicando la importancia de sentirse en una completa conexión con el entorno que nos rodea, que simplemente a veces las cosas antes de pensarlas es necesario primero respirar profundamente viendo que lo esencial es eso el aire que respiramos, y la calma que puede llegar a transmitir un lugar así, realmente en ese viaje pensé en lo que me gusta de nuestra relación y de lo mucho que estoy dispuesta a construir algo inolvidable.

Queda abierta la invitación para que conozcan o reconozcan los lindos lugares, que en particular me llenan de mucha paz.